EL KIWI: COMBATE LOS RADICALES LIBRES
Se trata de una pequeña joya repleta de beneficios para nuestra salud. Es una de las frutas con mayor contenido en vitamina C (tiene casi el doble que las naranjas). Tomando una pieza cada día cubrimos el 80% de las necesidades diarias de esta vitamina. Se ha comprobado que ayuda a evitar el nerviosismo, por lo que esta fruta puede considerarse un alimento útil para reducir el estrés. También incluye vitaminas del grupo B, especialmente ácido fólico, que es indispensable para reforzar el sistema inmunológico. Además es rico en minerales (potasio, magnesio y fibra). Por ello, es un alimento ideal para niños, adolescentes, embarazadas y ancianos.
La vitamina C y también la E que contiene poseen propiedades antioxidantes capaces de neutralizar el daño corporal que producen los radicales libres, por lo que comer kiwis nos ayuda a mantenernos más jóvenes, previene la aparición de muchas enfermedades o dolencias (cáncer, alergias, hipertensión, cataratas, angina de pecho…), y gracias a la fibra soluble mejora el tránsito intestinal y puede incluso reducir los niveles de colesterol.
Puesto que contiene mucha agua y pocas calorías (63 kcal por 100 g), un elevado índice de potasio y escaso sodio, es muy adecuado en dietas de adelgazamiento y para eliminar volumen en caso de retención de líquidos.